Mary Ellen Mark es una de esas fotógrafas que te atrapan. Escoger tan solo una decena de sus fotos resulta una tarea ardua y complicada. Todas, de verdad, todas, tienen algo que te cautiva, que te atrapa, que te seduce, que te atrae y que te impide pasar de largo y no detenerte a observarla y mirar los ojos de todas las personas que aparecen retratadas.

Siempre al lado de los desfavorecidos

Esta fotógrafa estadounidense hacía mucho más que imágenes, contaba historias sinceras y reales.

Mary Ellen Mark viajó por medio mundo y tuvo la oportunidad de conocer a uno de los símbolos de la paz, la madre Teresa de Calcuta. También trabajó en cine. Valoraron su talento grandes actores de la época, como fueron Catherine Deneuve, Marlon Brando o el director Woody Allen. Colaboró en más de un centenar de películas. Entre las más famosas se encuentran Alguien voló sobre el nido del cuco, Apocalypse Now y Satyricon.

Pero a pesar de haber estado en lo más alto, le gustaba compartir y conocer a los más desfavorecidos. Gran parte de su obra está centrada en esas personas que viven en la “oscuridad”.

Fotógrafa humanista

Firme defensora de los derechos humanos y de la igualdad, es considerada una de las más importantes fotógrafas humanistas. Al igual que Bruce Davidson, se acercaba y conocía a todos los personajes que retrataba. Un buen ejemplo es el que sucedió en Bombay. Durante tres meses Mary Ellen estuvo viviendo junto a las prostitutas de una calle para fotografiarlas con confianza. De este proyecto nació el libro Streetwise y la película documental bajo el mismo nombre, que dirigió su marido, el también fotógrafo Martin Bell.

Siempre hubo una parte de crítica y denuncia de esa sociedad de miseria que muchas personas estaban condenadas a vivir. Según explicó una vez la propia Mary Ellen Mark, “fotografiar el mundo tal como es. No hay nada más interesante que la realidad”. Se opuso abiertamente a la Guerra de Vietnam y en todo momento apoyó la liberación de la mujer y abordó cuestiones como la prostitución, las drogas o la vida en el circo. Otro de los temas más comunes en su trayectoria son los niños.

Puede decirse que Mary Ellen Mark es de esas artistas que dejan huella y arrasa por donde pasa. Desde los 9 años que comenzó a hacer fotos, ha trasmitido pasión y una fuerza arrolladora. Ha sido galardonada con innumerables premios, por citar algunos diremos que recibió tres becas de la Fundación Nacional para las Artes y la Contribución Sobresaliente del Premio de Fotografía de la Organización Mundial de la Fotografía.

A lo largo de sus más de cuatro décadas de carrera, publicó 18 libros de fotografías. Uno de ellos lo hizo junto a Annie Leibovitz, para dar la visión del la mujer en el fotoperiodismo.

Su trabajo ha podido verse en exposiciones de todo el mundo, en sus propios libros y en la revista Life, la Rolling Stone, The New Yorker y Vanity Fair, entre otras. Además, cabe recordar que formó parte de la agencia Magnum.

Mark murió en Manhattan con 75 años a causa de una enfermedad. Pero mejor acabaremos recordando una frase que explica cómo veía la vida y el respeto que sentía por la fotografía y por los fotografiados. “Creo que es importante ser directo y honesto con la gente acerca de por qué se les está fotografiando y lo que está haciendo. Después de todo, usted está tomando un poco de su alma”.